Número uno viene siendo el odiar aprender. En lo personal odiaba aprender, y me refiero en el aspecto aprender en la escuela. Iba a la escuela porque me decían que tenía que ir, porque me decían que sacara buenos grados.
Después me di cuenta que lo que odiaba era, obviamente el tener que aprender algo que no quería aprender. Entonces, de lo que estaba obligado a que aquí estuviera aquello, llevar a cabo sin que fuera algo que yo eligiera. Con el tiempo me di cuenta que el odiar, el aprender, pues me estaba también deteniendo de tener progreso obviamente en la vida.
Ahora yo te puedo hablar, por ejemplo, yo me acuerdo tomar trígono y trigonometría, algo así, y créemelo que hasta el día de hoy ni siquiera entiendo que es. Y digo ¿por qué tuve que tomar esa clase cuando hoy no utilizo eso que estudié?
Segunda cosa que odiaba: alimentarme sanamente. Yo recuerdo que mi mamá me ponía la comida, el brócoli, me ponía las verduras y era bien interesante porque me comía incluso. Esto es muy típico, yo creo en los niños, pero yo recuerdo claramente que me daban las verduras y me terminaba comiendo la carne, el pan, el queso, todo lo que sabía rico, porque de alguna forma u otra, todo lo que sabes rico para tu paladar, ¿qué crees? ¿Es lo que creamos, cierto?
Lo interesante es que no fue hasta que una vez escuché a un señor por el nombre. Por el nombre de Trino. El Señor Trino me dijo algo que razonó, algo que hizo click en mi vida. Dice Raúl que lo que es rico para el paladar, dice, es veneno para la sangre. Y dice Lo que es desagradable para el paladar es la vitamina debida para la sangre.
Vamos a entrar en el número tres: odiaba los lunes. La mayoría de la gente probablemente también lo hace. Odia los lunes, vive para los viernes o para el fin de semana. Y llega el fin de semana. Y piensas que la fiesta, la fiesta es la vida y listo.
¿Y por qué? ¿Por qué no vivir en fiesta todos los días? ¿Por qué no estar feliz todos los días? Es más, de hecho, hay un reporte que una vez leí de un estudio que hicieron que mayoría de las personas mueren y les da ataque cardíaco justo a los días lunes a las 08:00. Porque es justo a la hora que la mayoría de las personas que tienen un empleo tienen que irse a trabajar.
Entonces, imagínate, van y trabajan donde no quieren, están con gente que ni siquiera se pueden relacionar o llevarse bien y muy encima lo hacen porque a lo mejor por las obligaciones que tienen y demás. Pero yo era de los que personalmente odiaba los lunes, porque si me tocaba de repente estar un poquito el domingo en casa y se me hacía poquito y luego después otra vez tener que reiniciar el lunes. Y hoy en día te puedo decir que no importa el día de la semana, para mí es el mismo día, sin importar si es fin de semana o es entre semana. ¿Por qué?
Porque mi estilo de vivir lo he cambiado para que nunca me tenga que escapar de él. 4.ª cosa que odiaba es madrugar ok temprano y levantarme ultra temprano, pero lo hacía más por el aspecto de querer lograr cosas grandes en la vida. Pero en un punto sí lo llegué a detestar, no lo llegué a odiar. Entonces espero que entiendas esta frase.
Fíjate, hay una frase que dice “si quieres vivir bien o si quieres vivir en extraordinario en excelencia, vas a tener que al principio vivir mal”. Y ¿por qué vivir mal? Déjame te explico a qué me refiero. Porque en el proceso en el que tú estás recreando un nuevo programa o reacondicionado, te vas a lo vas a ver como si fuera algo mal, hasta cuando lo programas y se convierte en un. En un nuevo hábito, en una nueva creencia. En un nuevo paradigma. Número cinco. Este si que lo odiaba o le odiaba. Le odiaba totalmente. Nunca. Yo nunca fui considerado de lectura. Hoy en día me encanta. Pero ahí es donde entro otra vez.
¿Por qué me encanta? ¿Qué cambió? Déjame te explico. ¿Qué cambió? Lo que cambió es que rápidamente me di cuenta que si quería separarme de las masas, lograr mis metas, sueños, el agrandar mi vocabulario, el poderme relacionar con personas, el ser, etc., el llegar a ser exitoso, el llegar a contar con libertad y poder tener una amplitud, una amplificación de palabras y de vocabulario amplio. De poder obviamente estar en una conversación con personas preparadas, con personas que saben sobre la materia y demás, requería leer. Y no fue hasta que alguien escuché.
Creo que fue Jim Rohn que dice que los líderes son lectores y es algo bien importante y bien poderoso, porque si lo creo y no fue hasta que también en una vez recuerdo que estuve con un señor y esto fue modesto California. Cuando yo miraba que personas le preguntaban a él, le hacían una pregunta y él les recomendaba cierto libro a las preguntas que le hacían. Y yo recuerdo bien claro que.
Se me quedó bien grabado esa ocasión porque dije ¿Cómo es que este hombre a través de un libro los puso a leer y le respondió la pregunta? Cualquier pregunta que tuvieras. Y si tú le preguntabas, por ejemplo, algo de liderazgo te mandaba leer libros de liderazgo, si le preguntabas algo de cuestión de ventas, te mandaba a leer libros de ventas. Y en ese momento me queda claro. Dije “Por eso él es multimillonario, porque sabe resolver problemas y sabe las soluciones a los problemas que las personas tienen en forma de preguntas.”
¡Que poderoso! Y de ahí comencé a leer como nunca. Y después de tanto repetirlo y de darme cuenta de que me iba a acercar a mis sueños, a mis metas, me enamoré de la lectura. Te puedo dejar saber que ahora amo aprender, amo alimentarme sanamente, aunque de vez en cuando tú sabes que de vez en cuando comemos lo que no debería ser, pero de igual forma amo las verduras. Hoy veo la importancia. Amo los lunes, martes, miércoles, jueves, viernes, sábado y domingo.
Amo el poder madrugar y sentirte bien, pleno, lleno de luz. Y amo leer. ¿Sabes por qué? Porque el aprendizaje es infinito, y nunca llegaremos al final.